Morelia, Michoacán
Uno de los más grandes tesoros de Michoacán, son sus hombres y mujeres, guardianes del valor artesanal tradicional del Estado. En sus genes, a través de sus manos, llevan tatuados los conocimientos históricos de sus ancestros, los mismo que transmiten con amor y cuidado, a su descendencia.
Es la riqueza genética de Michoacán para el mundo concentrada en 16 ramas artesanales, a las que se dedican poco más de 9 mil 148 personas; de ellas, 5 mil 543 -alrededor del 60 por ciento-, son mujeres que en los últimos cinco años han recibido el mayor impulso financiero, en capacitación y en salud, buscando su empoderamiento total.
La creación de esas piezas artesanales está íntimamente vinculada a las comunidades nativas y pueblos originarios del Estado; de una de esas mismas localidades es la directora general del Instituto del Artesano Michoacano (IAM), María Emilia Reyes Oseguera, mujer por cuyas venas corre sangre de artesanos.
Con su nombramiento, el Gobernador Silvano Aureoles dijo buscar garantizar que esa dependencia fuera dirigida por alguien que conoce las necesidades y retos de ese importante sector económico.
La migración, la marginación, la pobreza y, ahora el COVID-19, representan las grandes amenazas a la comunidad artesanal de Michoacán.
Por ello, ahora en la entidad se alista la estrategia para reimpulsar, bajo el enfoque de la Nueva Convivencia, la comercialización de los trabajos que crean, tallan, pintan, cortan y trazan en telares, utilizando además materias primas que nacen de las entrañas de las tierras tarascas, como el barro, la madera y el algodón.
Reyes Oseguera resaltó cómo Michoacán se distingue a nivel nacional por la diversidad de su producción artesanal, así como por la gran cantidad de habitantes dedicados a dicha actividad; calculó que, en al menos 200 comunidades, ubicadas en 60 municipios michoacanos, existe la presencia de mujeres y hombres, de familias artesanas que resguardan parte de la esencia de nuestras tradiciones.
Frente al reto de rescatar las cifras históricas que alcanzó Michoacán en materia de turismo y todas sus vertientes, como las artesanías, Aureoles ordenó un plan “ambicioso e integral, donde la realización de exposiciones masivas, ferias y demás, deberán ser reenfocadas y los concursos, rediseñados” –dijo-.
Y es que esas actividades demostraron su importancia en la tarea de difundir la riqueza histórica, cultural y tradicional de la artesanía michoacana, dándole difusión y promoción en espacios educativos, culturales, sociales y comerciales, pero ahora, por protección y salud, las cosas deberán cambiar.
En el 2019, se realizaron alrededor de 45 concursos artesanales estatales, regionales y comunales, detonando la asistencia de miles de personas, como el Tianguis y Concurso Estatal de Artesanías del Domingo de Ramos en Uruapan, reconocido como el más grande de América Latina por la participación de más de mil 300 artífices de todo el Estado, quienes exponen y venden sus piezas en las plazas principales de esta ciudad; “Mártires de Uruapan” y “Morelos”, así como en la Huatápera”, señaló Reyes Oseguera.
Y como ese concurso, decenas más, que provocan el traslado de familias artesanas procedentes de distintos puntos del Estado. La pandemia y la contingencia sanitaria desplegada, obliga ahora a un replanteamiento, que permita el rescate de esas muestras artesanales.
A María Guadalupe Pérez Domínguez todos en Santa Fe de la Laguna, comunidad del municipio de Quiroga, la conocen como “Joana”. Ella es alfarera por su abuela y hoy trabaja el vidrio sin plomo en el pequeño taller familiar donde se congregan además otras mujeres y jóvenes que quieren aprender a hacer las “ollitas”.
Cecilia Bautista Caballero vive en la calle 5 de mayo, número 165, en la comunidad de Ahuirán, municipio de Paracho, un rincón michoacano donde la artesanía se expresa de muchas formas, desde los coloridos telares hasta las internacionales guitarras de pino abetos o pinabetes con aros de cedro y del árbol de paloescrito.
En ese lugar, Cecilia, que ya rebasa las siete décadas, ha escrito toda una historia familiar en el arte del telar de cintura, el que aprendió cuando apenas rayaba los ocho años. Su vida, es causa constante de referencias en el mundo de los artesanos.
Bellos rebosos en vivos tonos, con su particular distintivo en las puntas terminadas en plumas de diferentes aves, le han valido premios estatales, nacionales y en países como Estados Unidos (Nuevo México, Texas y Nueva York) y Venezuela, un arte que heredó a sus hijos y ahora, a sus nietos. Ellos seguirán esa singular historia.
El IAM se encarga precisamente de velar por los intereses y la preservación de la riqueza genética que representan esos hombres y mujeres artistas, haciendo valer el marco legal actual que existe en la materia con la Ley de Fomento Artesanal del Estado de Michoacán de Ocampo.
Esa norma regula las 16 ramas marcadas como producción artesanal, como es la alfarería; maque y laca perfilada en oro; metalistería; maderas; fibras vegetales y popotería; pasta de caña; textiles: juguetería; laudería; equipales y talabartería; miniatura; papel picado; arte plumario; cantería y lapidaría; joyería y cerería.
Los trabajos elaborados por estas mujeres y hombres, han destellado en el mundo por su belleza y colorido; por su origen y significado, reconocidos en España (Casa de México en España), Italia (el Vaticano) y Francia (Museo de Louvre), y en otros lugares de la Unión Americana.
La artesanía alcanzó cifras históricas en los últimos años. En 2018, el gasto total en bienes y servicios del sector por actividades culturales fue de 881 mil 679 millones de pesos y de esa cantidad, el 23 por ciento se gastó en artesanías.
En el ramo turístico, las artesanías representan el segundo rubro de mayor gasto solo después de los medios audiovisuales que ocupan el 38.1 por ciento, de acuerdo al histórico de referencia difundido.
En tanto que, en 2019, la suma total de artistas ganadores en los concursos estatales y nacionales sumaron mil 586, quienes obtuvieron una bolsa global en premios superior a los 6 millones 691 mil pesos.
Ese año, el IAM desarrolló 45 concursos artesanales; estatales, regionales y comunales, en los que participaron 6 mil 135 artistas con 10 mil 716 piezas inscritas, generando una derrama económica de 5 millones 303 mil pesos, en mil 523 premios entregados al mismo número de artesanas y artesanos.
Asimismo, la comercialización de artesanías durante el 2019 fue de 9 mil 137 piezas vendidas en la tienda “Casa de las Artesanías” de esa dependencia, con una derrama económica de 9 millones 160 mil 342 pesos.
NUMERALIA
• 9 mil 148 artesanos resguardan esa riqueza histórica de Michoacán.
• 16 ramas artesanales se elaboran en Michoacán.
• 60 por ciento de la población artesana, está compuesto por mujeres (5 mil 543).
• Mil 586 artesanos ganaron premios por más de 6 millones 691 mil pesos en concurso estatales y nacionales.
• En 2019 se realizaron 45 concursos artesanales; estatales, regionales y comunales.
• 6 mil 135 artesanos, con 10 mil 716 piezas inscritas, participaron en los concursos.
• 5 millones 303 mil pesos en mil 523 premios, se generaron en los 45 concursos realizados.
• 75 muestras con 3 mil 300 artífices, se realizaron en 2019.