Las alertas por la propagación del coronavirus en territorio chino ha colmado de miedo no sólo a la población, también a las empresas que, como medida preventiva, cerraron varios o todos sus locales en el país asiático.
Hasta el momento no se sabe cuándo volverán a la normalidad en China, pero mientras, se quedaron sin varios servicios de comida rápida, tecnología, entretenimiento y hasta manufactura automotriz.
Alphabet, filial de Google, fue una de las primeras que decidió cerrar todas sus oficinas en China, Hong Kong y Taiwán tras los primeros anuncios del tremendo alcance que tiene la enfermedad. Facebook, por su parte, mantiene a sus empleados en casa y los que están fuera no pueden volver. La compañía electrónica Alibaba Group también mantienen a sus empleados en casa.
Los grupos financieros de HSBC, Goldman Sachs y Standard Chartered restringieron a sus empleados los viajes a Hong Kong y China. En caso de que lo hayan hecho recientemente, deberán permanecer en cuarentena en sus hogares.
Toyota, empresa automotriz que tiene varias fábricas en el país también decidió dejar de operar, por lo menos hasta el 9 de febrero de 2020. Si la situación sigue sin ser favorable podrían extenderlo. Volkswagen permanecerá inactivo o en homeoffice hasta el 10 de febrero.
Samgung Electronics también se sumó a la suspensión de sus operaciones en varios complejos; lo mismo sucedió con AB Inbev, quienes pararon su producción en Wuhan, ciudad donde comenzó el virus.
Las empresas más grandes, encabezadas por Apple, cerró una de sus principales tiendas y redujo el horario de atención en otras . También optó por restringir los viajes de sus empleados que continuamente abandonan o llegan a China.
Walt Disney también optó por cerrar sus resorts y parques temáticos en Shanghái y Hong Kong, a pesar de ser una de sus épocas altas más importantes de todo el año. H&M, la tienda de ropa por excelencia, cerró 45 de sus tiendas.
Finalmente fueron McDonald's y Starbucks los que cerraron varios puntos de venta. Los hamburgueseros lo hicieron en la provincia de Hubei, mientras que la marca de cafés paró actividades en la mitad de sus sucursales en China.