La primera semana del juicio contra Genaro García Luna se la llevó Sergio Villarreal Barragán, alias “El Grande”. En la Corte del Distrito Este de Nueva York dio explosivas declaraciones, relató millonarios sobornos, un secuestro al propio García Luna y hasta el fiasco de la boda de Édgar Valdez Villarreal, alias “La Barbie”. Sus declaraciones retrataron no sólo un Estado débil, sino fundido hasta la médula con el narcotráfico. Sin embargo, la primera semana del juicio concluyó sin pruebas documentales ni periciales. Este caso cuestiona la capacidad de la DEA, el FBI, la CIA y todas esas agencias que se pintan como infalibles, pero que confiaron en él.
“El Grande” hizo muchas afirmaciones pero resalto algunas porque involucran a los hombres de más confianza de García Luna. Funcionarios de primer nivel que están acechados por la justicia norteamericana como Cárdenas Palomino quien está detenido en México, pero desde julio de 2020 Estados Unidos lo acusa de tres cargos relacionados con narcotráfico. Lo mismo para Ramón Pequeño García, quien está prófugo, pero hay una ficha más, una que sí está en Estados Unidos y que podría inclinar la balanza por completo, Iván Reyes Arzate, alias “La Reina”.
