El monumento más famoso de París volvió a recibir a los turistas, los cuales expresaron su alegría de ver abierta la torre, mientras otros lugares turísticas aún permanecen cerrados, como el Museo de Louvre, el cual reabrirá el próximo 6 de julio.
Para los habitantes de París también es muy especial ver la torre abierta y poder disfrutar de ella.
“Es algo muy especial porque los habitantes de París también pueden disfrutar de ella. Hemos visto a muchos habitantes de París disfrutando de su ciudad, disfrutando de sus parques, sin tantos turistas”, dijo una turista de Holanda.
Los visitantes tendrán que subir por las escaleras, ya que el elevador que lleva a la cima de la torre continúa cerrado.
Solo dos terrazas están abiertas, de un total de tres, y los visitantes deberán de seguir las medidas de protección, como mantener una distancia de 1.50 metros, así como llevar cubrebocas para acceder al monumento.
Patrick Branco Ruivo, director general que gestiona el monumento, indicó que durante el tiempo que permaneció cerrada, tuvo pérdidas de nueve millones de euros al mes (10.1 millones de dólares).