Luego de la polémica que se ha generado a raíz de una carta que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador envió al gobierno español y al papa Francisco, para que ofrezcan disculpas por el periodo de la Conquista, las reacciones al respeto han sido muy diversas.
Importantes figuras han manifestado que la disculpa no tiene lugar a 500 años de la Conquista, y otros más han dicho que sí debería de darse y es necesaria para iniciar una nueva relación México-España.
https://twitter.com/perezreverte/status/1110322280310153216
Aunque para algunos parezca un hecho aislado que una nación ofrezca disculpas por los atropellos cometidos a otros pueblos, no es descabellado, y son principalmente países del llamado ‘primer mundo’ los que han asumido tal responsabilidad.
https://twitter.com/epigmenioibarra/status/1110284673534455808
La independencia de Argelia se dio entre 1954 y 1962 y fue hasta 2018, que Macron reconoció el asesinato de Maurice Audin, un profesor ayudante en la Universidad de Argel, y pidió perdón en nombre de los franceses.
En el 2000 el entonces presidente Johannes Rau, ofreció una disculpa ante el parlamento israelí.
"Pido perdón por lo que hizo Alemania a los judíos, en mi nombre y en nombre de mi generación", dijo Rau.
En 2015, Jeanine Hennis, entonces ministra de Defensa, ofreció una disculpa en nombre del gobierno holandés, por este acontecimiento en el que murieron 8 mil musulmanes en 1995.
La generación “Windrush”, que era el nombre de un barco que llevó a Reino Unido a migrantes de Jamaica, Trinidad y Tobago y otras islas del Caribe en 1948, fue incitada para cubrir el déficit laboral luego de la guerra.
Esta se dio ya que, en 1939, durante la Segunda Guerra Mundial, Canadá rechazó un barco en el que viajaban 907 judíos considerados "indignos" de tener un hogar.
En 2015, se presentó una disculpa histórica con la comunidad sefardí, misma que fue despojada en 1492 del territorio que habitaba, además, por este hecho España aprobó una ley para que dicho grupo pudiera acceder a la nacionalidad española.
La Corona Española obligó en 1492 a los sefardíes a tomar una decisión: convertirse a la religión católica o dejar el país.