Andrés Manuel López Obrador aseguró que México no tendrá piedad en el combate al tráfico de armas y a la venta de las mismas en territorio nacional, pues le causan un gran daño a la sociedad.
Durante la conferencia mañanera desde Valle de Bravo, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue cuestionado sobre la estrategia del gobierno federal contra el tráfico de armas que llega desde los Estados Unidos, a raíz del ataque en El Paso que dejó más de 20 muertos y decenas de heridos.
Al respecto, el presidente aseguró que no se permitirán acuerdos con el gobierno estadounidense para introducir armas al país, "como se hacía antes". Incluso señaló que esta clase de tratos eran clandestinos, se hacían por debajo del agua entre funcionarios de alto rango.
"Estamos trabajando para evitar que entren armas de contrabando. El ejército y la Semar tienen un plan y se han logrado varios decomisos de armas. Creo que hay algo importante que destacar: ya no se permite ningún acuerdo, como era antes, con el gobierno de Estados Unidos para introducción de armas a nuestro país. Hubo en un tiempo hasta un acuerdo, inclusive confidencial, clandestino, para introducir armas a México. Eso no será permitido, desde luego estamos combatiendo el tráfico de armas, haciendo un esfuerzo especial por el daño que causan en nuestro país, de acuerdo a la legislación vigente, existe más control que en otros países en cuanto a la adquisición y portación de armas", dijo el presidente.
Por último, aseguró que México no intervendrá en el asunto, pero pidió que la tragedia no sea utilizada con propósitos electorales, pues los seres humanos que perdieron la vida en el ataque merecen respeto.
