La directora general del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, la Dra. Elena Álvarez-Buylla, se reunió con los trabajadores de base y operativos de la institución para escuchar sus opiniones acerca del nuevo servicio de comedor. Los empleados le expresaron su gratitud por haber mejorado notablemente la calidad de los alimentos, elaborados en su mayoría con ingredientes sanos. Recordaron que, en administraciones pasadas, los alimentos del comedor se preparaban con productos industrializados con altos niveles de grasas, azúcares refinadas y exceso de carbohidratos.
La Dra. Álvarez-Buylla explicó que decidió transformar el comedor y hacer un esfuerzo institucional para que los trabajadores del Conacyt tuvieran acceso a una alimentación saludable con apego al Art. 4° constitucional, que afirma que “toda persona tiene derecho a la alimentación nutritiva, suficiente y de calidad”. Recordó que los platillos del comedor del Conacyt “no son un lujo, ni son gourmet. Corresponden con una dieta balanceada y se elaboran con algunos ingredientes agroecológicos, producidos por familias campesinas y pequeños productores”.
Asimismo, les explicó que la nueva administración decidió recortar los gastos superfluos: se cerró el comedor de directivos, que contaba con chef y roof garden; se suspendió la compra de garrafones y botellines de agua para reemplazarse por filtros; se canceló el alquiler de más del 90% del parque vehicular, y, sobre todo, se eliminaron los gastos de representación para altos mandos, como las facturas en restaurantes lujosos. “En el nuevo Conacyt ningún directivo tiene esos privilegios. Se han suprimido gastos superfluos, con ahorros significativos”, afirmó.
Agregó que el presupuesto estimado para el comedor es de 6.9 millones de pesos anuales, ligeramente mayor que el año pasado, pero que de ninguna manera asciende a 15 millones, como se ha asegurado en algunos medios.
Cabe señalar que las tarifas de los menús del Comedor del Conacyt se ajustan constantemente y se orientan bajo un modelo de equidad: quien gana menos paga menos; quien gana más paga más. La comida para los empleados de base tiene un costo de $23.00; mientras que los mandos directivos no tienen subsidio, sino que pagan el costo real del menú e incluso un poco más, de manera tal que contribuyen con el subsidio para las y los trabajadores con salarios más bajos. Dichas tarifas se están ajustando según el uso en estos primeros días para maximizar el subsidio a trabajadores de base y operativos de confianza con los salarios más bajos y minimizar pago del Conacyt.
