Arturo Lona Reyes, conocido como el “Obispo de los Pobres”, murió la mañana de este sábado luego de contagiarse de Covid-19.

Por complicaciones en su estado de salud a causa del Covid-19 y tras varios días de permanecer en el Hospital Médica Azul de la Ciudad Cooperativa Cruz Azul Lagunas, en la región del Istmo de Tehuantepec, Oaxaca, murió luego de una larga agonía.

El secretario Canciller de la Diócesis de Tehuantepec, Joaquín Galván, conrfirmó su muerte a los 95 años, era llamado “Obispo de los Pobres” por su compromiso social con las comunidades y puebloas indígenes de Oaxaca.

Lona Reyes apoyaba el movimiento gestado por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), fungió como mediador en la revuelta social del 2006, también defenció la selva de los Chimalapas de las invasiones de grupos caciquiles de Chiapas y la tal inmoderada de bosques.

En en año 200, se convirtió en obispo emérito, y desde su vida pastoral fundó 15 bachilleratos maristas y también una universidad de la orden de los jesuitas hace 13 años, con la que seis generaciones de jóvenes indígenas de la zona norte del Istmo han logrado seguir estudiando.

También creó dos cooperativas de producción, una de café orgánico que exporta al continente Europeo y otra de ajonjolí.

Por su parte, el gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa, a través de sus redes sociales, lamentó el fallecimieto del “Obispo de los Pobres”, y expresó sus condolencias, y recordó que cariñosamente le decía “padrino”, además destacó que fundó escuelas y cooperativas donde miles de jóvenes se formaron.

También el presidente Andrés Manuel López Obrador, lamentó la muerte del obispo Arturo Lona, y recordó cuando lo visitó en Palacio Nacional el pasado 26 de febrero en 2019, donde le reconoció por su trabajo ejemplar en favor de los más pobres.