El diario ‘The Wall Street Journal’, informó que los frascos fueron confiscados en investigaciones separadas para después someterlos a pruebas en donde se detectó que su contenido era falso.
En México, las dosis contaban con etiquetados fraudulentos, mientras tanto en el caso de Polonia se detectó que probablemente sea un tratamiento antiarrugas la sustancia que se encontraba en los frascos.
En febrero fue clausurada una clínica en el municipio San Pedro de la Garza, en Nuevo León, en esta se aplicaron las vacunas falsas a aproximadamente 80 personas, las cuales pagaron 11 mil 100 pesos por dosis, aparentemente estas no han sufrido algún daño físico.
De acuerdo con el doctor Manuel de la O, secretario de Salud de Nuevo León, en su etiquetado tenían números de lote diferentes a los que fueron enviados a la entidad, asimismo, la fecha de expiración era falsa, los falsos inmunológicos se encontraban en hieleras.