El investigador de 73 años, el cual se encuentra trabajando en el Centro de Investigaciones Biológicas Margarita Salas (CIB-CSIC) en donde se desarrolla una vacuna contra Covid-19, informó al diario español ‘El País’ que la inmunización con las vacunas de Johnson & Johnson, así como la de AstraZeneca debería de continuar.
En la entrevista el especialista mencionó que no es casualidad que “una repetición con dos vacunas similares que produzca unos trombos con bajadas de plaquetas que son muy infrecuentes”, por lo que declara que se está “sobreactuando” puesto que no hay ninguna autoridad que quiera asumir el riesgo.
El principio de precaución está muy bien y hay que usarlo, pero es un equilibrio, no te puede llevar a la inmovilidad”.
Señaló que los casos de Trombosis que se han presentado son “muchísimos menos” que si no se vacunara la gente, informando que es mucho más peligroso no vacunarse puesto que cree que no existe tiempo suficiente para poder encontrar una explicación científica a estos casos.
De igual manera, aclaró que en caso de que una personas resulte susceptible a una reacción adversa, esta se presentaría desde la primera dosis, por lo que, en caso de no presentarlas se puede aplicar la segunda dosis sin ningún problema.
Larraga declaró que en este momento hay un exceso de información lo cual confunde a la gente, pues muchas veces no se refleja la peligrosidad real de un fármaco, revelando que hay algunos que son mucho más peligrosos y aun así la gente se los toma.
La gente pregunta ‘¿qué me va a poner?’ pues le vamos a poner una cosa que le va a salvar la vida, no va a ir a un hospital ni entrar en una Unidad de Cuidados Intensivos”.
Respecto a la vacuna que se desarrolla en su departamento puntualizó que van de acuerdo al calendario previsto, esperan que la fase III esté terminada a finales de año, asimismo, mencionó que para la fase clínica buscarán voluntarios en lugares donde todavía hay muchas personas sin vacunar como África, Latinoamérica y el sureste de Asia.
Informa que a diferencia de otras vacunas, la que desarrolla su equipo puede resistir la temperatura ambiente por un tiempo, debido a que es una vacuna de ADN.
Como mucho, necesita una nevera normal y corriente. Y esto puede ser muy útil porque seguramente tendremos que estar conviviendo con las vacunas al menos dos o tres años”.
Vicente Larraga: "Hay fármacos mucho más peligrosos y la gente se los toma con una fruición que les falta mojar pan. La gente pregunta: “¿Qué me van a poner?”. Pues le vamos a poner una cosa que le va a salvar la vida"
— EL PAÍS América (@elpais_america) April 15, 2021
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Con información de: El País.
