De acuerdo con fuentes citadas por ‘Los Ángeles Time’, cerca de media docena de asistentes y operadores de cámara renunciaron el día del accidente debido a que en jornadas previas se registraron problemas con la misma arma, señalan que esta no estaba correctamente supervisada.
La productora de la película señaló que la pistola se encontraba cargada con cartuchos de fogueo y no con balas, sin embargo, las autoridades no han confirmado la información, por su parte, la oficina del Sheriff de Santa Fe en Nuevo México, Estados Unidos, afirmó que no se tendrá más información hasta la próxima semana, de acuerdo con como siga la investigación.
De igual manera, tres empleados señalaron que un grupo de técnicos se había quejado debido a la “falta de medidas de seguridad muy seria” en el plató. Fue hasta seis horas antes del incidente que media docena de operadores de cámara abandonaron el estudio, estos fueron reemplazados por personal que no se encontraba adscrito a ningún sindicato profesional.
Lane Luper, asistente de cámara adscrito a la Alianza Internacional de Empleados de la Escena (LATSE por sus siglas en inglés), se expresó sobre las presuntas condiciones precarias del rodaje mediante su cuenta de Facebook.
En este momento, estoy luchando para que mi equipo, en esta película, tenga habitaciones de hotel cuando nos demoramos o estamos demasiado cansados para conducir una hora de regreso desde el lugar de grabación hasta Albuquerque. O dicen que no o nos ofrecen un motel basura junto a la carretera que se utiliza como refugio para mendigos”.
Los comentarios se publicaron como respuesta a un video en el que se puede ver a Baldwin animando al sindicato para convocar una huelga mientras se negociaba un convenio con la patronal de estudios de Hollywood, señalando que estaban “tratando al equipo local como mierda de perro”.
Con información de: EFE.
