Una madre de los Estados Unidos ha dicho sentirse la peor mamá del mundo al intentar mantener en orden su casa.

Al parecer Lindsey Preiss solo pretendía seguir los consejos de Marie Kondo para mantener su casa en orden, pero al final se llevó una terrible noticia cuando donó una taza de su hijo.

Su intención era –sin duda- buena, tomó una taza vieja que pertenecía a su hijo cuando éste niño y la donó a Goodwill, una empresa que brinda apoyo y trabajo a personas necesitadas.

Resulta que en el interior de la taza iba un ahorro cercano a los seis mil 500 dólares que pertenecía a Devon Silvey, hijo de Preiss.

Devon estaba realizando una mudanza y para no dejar el dinero en el banco decidió dejarlo en esta taza, pero cuando regresó por ella, se llevó una gran sorpresa al ver que ya no estaba.

“Al principio pensé que era una broma o algo así… ella pensó que estaba molesta por la desaparaición de la taza, yo también extraño la taza, pero lo que había adentro era un poco más importante”, señaló Devon.

Tanto la madre como el hijo acudieron a la tienda para ver si podían rescatar la taza. Los gerentes de la tienda rastrearon las imágenes de vigilancia y solo vieron que un empleado le colocó el precio y posteriormente la depositó en un contenedor.

Hasta el momento se piensa que la taza fue vendida y Devon y su madre ofrecen una recompensa a quien la tenga y la devuelva.

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